Por: Alexander Ramirez Mendoza
Encuentre el dálmata que se encuentra escondido entre los osos panda del siguiente gráfico.
Ante la enorme cantidad de información que nos llega a través de los sentidos, nuestra mente consciente solo es capaz de procesar una pequeña parte toda de esa información que recibimos. La atención es la responsable de lograr la máxima eficiencia para operar los recursos limitados para el procesamiento de la información, de tal manera que podamos adaptarnos a un entorno complejo y cambiante como lo es el tráfico.
Se puede definir la atención como: el proceso y la habilidad de concentrar los recursos mentales para seleccionar los estímulos sensoriales más relevantes.
Gracias a la atención, un conductor es capaz de seleccionar los elementos más importantes -entre los numerosos estímulos que hay dentro de su campo visual- para operar el vehículo en la vía de manera segura y eficiente.
Para entender mejor el funcionamiento de la atención mientras se realiza la actividad de conducir es necesario conocer los siguientes conceptos:
- La atención selectiva
- La atención sostenida
- La atención dividida
1. Atención selectiva: consiste en dirigir todos los recursos mentales hacia unos aspectos específicos del entorno vial, omitiendo otros que no son importantes para una conducción segura. Ante la gran cantidad de información que continuamente recibimos del entorno y dada la limitada capacidad de procesamiento que tenemos, se hace necesario realizar algún tipo de selección entre toda la información que recibimos. La atención es el mecanismo psicológico que se encarga de realizar este proceso selectivo.
Hagamos el siguiente ejercicio para comprender mejor este concepto.
Encuentre este pepino en el siguiente cuadro
Para desarrollar la actividad se debe focalizar toda la atención en la búsqueda del estímulo más relevante, en este caso el pepino, omitiendo toda la demás información del entorno.
Si ya logro terminar con éxito la actividad, me imagino que no habrá notado que hay 8 huevos fritos en el cuadro. Posiblemente vio algunos huevos, pero no los contó porque no era información relevante para el desarrollo de la actividad. Esto es lo que se como; ceguera por inatención y que fue expuesto en el artículo anterior.
El conductor está recibiendo continuamente multitud de estímulos en la vía (señales de tránsito, carteles, vallas publicitarias, peatones, ciclistas, motociclistas, etc.), debido a esto tiene que enfocarse en los que sean más significativos y que impliquen una conducción segura. De lo anterior se puede deducir que la atención es un proceso selectivo de información que el conductor debe tener en cuenta para elegir la acción más adecuada en el contexto vial.
2. La atención sostenida: se define como la habilidad para mantener centrada la atención y estar alerta a los estímulos durante largos períodos de tiempo a pesar de la monotonía o la frustración. Mientras conducimos un vehículo debemos mantener un adecuado nivel de alerta y permanecer todo el tiempo atento. Esto es de gran importancia porque en cualquier momento puede ocurrir un cambio repentino en el entorno ante el cual hay que reaccionar rápidamente para evitar un siniestro.
3. La atención dividida: tiene que ver con la capacidad para desempeñar, por lo menos, dos actividades al mismo tiempo, cosa que implica demasiado riesgo durante la conducción.
La siguiente actividad consiste en leer el texto que aparece a continuación y al mismo tiempo que va leyendo debe contar las veces que aparece la letra “n”.
El inconfundible y popular jilguero es una de las especies más comunes y extendidas en nuestro territorio, especialmente en el sur y algunos puntos del este peninsular.
Ave muy gregaria —sobre todo en invierno—, el jilguero suele agruparse en bandos mixtos con otros fringílidos que nomadean en busca de alimento.
En invierno recibimos abundantes ejemplares procedentes de otras latitudes europeas, que se unen a la fracción sedentaria de la población.
Debido a su aspecto y vistoso canto es frecuentemente capturado como ave de jaula.
Cabe aclarar que no existe tal cosa como la multitarea. El ser humano solo puede hacer (o pensar) una cosa a la vez. Lo que el cerebro realmente hace cuando realizamos aquello que llamamos «multitarea», es cambiar de manera alterna entre una tarea y otra por cortos periodos de tiempo. El cerebro puede hacer estos cambios con bastante rapidez, lo que genera la ilusión de que estamos haciendo dos actividades al mismo tiempo.
Finalmente, la atención ejecutiva o control atencional, está asociada a la capacidad de autorregulación, y permite, de manera voluntaria y consciente dirigir las conductas, inhibir respuestas automáticas y detectar errores relacionados con la atención.
Para terminar, este último ejercicio requiere de la utilización de los tres tipos de atención para lograr correctamente su resolución:
La respuesta es… 43, ponga más atención.
Saludos;